¿Para qué sirve el colágeno en la piel?
Tu cuerpo tiene una gran composición de colágeno en él, se encuentra en la piel, las uñas, el cabello y hasta incluso los músculos. Es una proteína que ayuda la textura y salud de tu cuerpo dándole un mejor aspecto pero, ¿conoces la importancia de su producción para tu piel? Si no es así, quédate a leer esta entrada de blog pues te contaremos qué es, cómo cuidarlo, a qué edad dejamos de producirlo y los productos que te ayudan a su cuidado.
¿Qué es el colágeno y por qué todo el mundo lo recomienda?
Seguramente has escuchado que se puede tomar, untar o producir con tu cuerpo. Sí, es muy amigable con el humano porque es una proteína que conoce y acepta muy bien. Sin embargo, también se debe cuidar porque no se logra recuperar por completo. ¿Sabías que a medida que envejecemos, la capacidad de sintetizar disminuye y, en determinadas situaciones (sobrepeso, excesiva actividad deportiva,…) se acelera el desgaste en la barrera de tu piel?
El colágeno se caracteriza principalmente por su notable resistencia: está constituido por un
conjunto de tres cadenas polipeptídicas. La extensión de la glicosilación es muy variable entre los diferentes tipos de colágeno e, incluso, dentro de un mismo tipo; cambia según el tejido y también con la edad. Se ha observado una relación inversa entre el contenido en hidratos de carbono y el diámetro de la fibra de colágeno, por lo que uno de los papeles asignados a la glicosilación es participar en la fibrillogénesis.
Colágeno en la piel
La principal función del colágeno es la de crear y mantener las estructuras de los tejidos que forman el organismo, incluida la piel, por lo que tiene una importancia decisiva en propiedades como la firmeza y flexibilidad.
Otro aspecto que importa es el aspecto de la piel pues tiene dependencia considerablemente de esta proteína. Aunque la producción de colágeno se reduce irremediablemente con la edad, existen una serie de remedios que ayudan, en cierto grado, a restaurar los niveles de esta sustancia en el cuerpo, como el colágeno hidrolizado (es decir, que ha pasado por un proceso de hidrólisis, que es la ruptura de ciertas moléculas para que el colágeno pueda ser absorbido por el organismo).
También hay productos que te ayudan a la producción del mismo gracias a sus activos que penetran la piel y entre sus beneficios puedes encontrar:
- Mejora la firmeza y la elasticidad de la piel.
- Fortalece y mejora su aspecto.
- Contribuye a que la piel se mantenga hidratada
- Protege la piel frente a agentes externos como el sol, la contaminación o el frío
- Disminuye las arrugas, las líneas de expresión y las estrías
- Previene y retrasa los signos del envejecimiento
- Reduce las marcas de acné gracias a sus propiedades cicatrizantes
- Ayuda a sanar las heridas
- Combate la flacidez facial y la celulitis.
¿Qué producto con colágeno puedo elegir para mi piel?
Estos dos productos ayudan a eliminar otros signos de la edad que aparecen con la pérdida de colágeno como lo son la flacidez facial, el exceso de pigmentación.
Esta combinación de productos ayudan a activar tu piel para que comience la producción de colágeno y elastina gracias a las propiedades del jabón de granada, del gel de granada y la talquera de thanaka. Es ideal para que tu piel obtenga nutrientes poderosos que renovarán por completo tu piel.
La efectividad debe ser homogénea, ¿por qué no pruebas una rutina completa en tu cuerpo? El colágeno puede evitar las celulitis y flacidez en las piernas o brazos, por eso este kit es para que enteramente luzcas bella, es entero para que lo disfrutes al máximo. Pruébalo ahora y compártenos tus resultados.
¿Cómo prevenir la pérdida de colágeno?
-Reducir la exposición al sol:
La radiación ultravioleta afecta a la producción de colágeno en la piel, ya que hace que se descomponga más rápidamente. Te recomendamos aplicar siempre una fotoprotección adecuada como la multi protección uv.
-Cuidar y/o modificar la dieta:
Añadir alimentos ricos en colágeno es beneficioso para la piel. Esta proteína puede encontrarse en carnes y pescados como el atún y el salmón, lácteos, frutos secos o gelatinas. -Consumir vitamina C para ayudar a la producción de colágeno y vitaminas E y A, con el fin de mejorar la elasticidad de la piel, es una acción muy sencilla y saludable para tu sistema digestivo.
-Disminuir el consumo de alcohol y tabaco:
Estos agentes desencadenan acciones que deterioran las fibras colágenas y acelera el envejecimiento de la piel, por lo que conviene eliminar su consumo o reducirlo al máximo.